Cada vez nos encontramos más clínicas de fisioterapia equipadas con ecógrafo. La ecografía constituye un avance en el campo de la fisioterapia ya que dota al profesional de una herramienta más para valorar de forma más objetiva el tejido lesionado, permitiendo así ver la evolución de las lesiones músculo-esqueléticas y aplicar el tratamiento que mejor se adapte al estadio y características de la misma. Os hablamos de ecografía y fisioterapia con la fisioterapeuta Emi Martínez Gombao.
Ecografía y fisioterapia ¿Qué es la ecografía músculo-esquelética?
La ecografía musculo-esquelética nos permite explorar las estructuras del aparato músculo-esquelético como músculos, tendones, ligamentos, cartílagos, así como también venas y arterias con ayuda del Doppler.
Las imágenes se pueden obtener tanto en estático como en dinámico. Por ejemplo, cuando se solicita un movimiento articular y se valora el desplazamiento de los tejidos, las contracciones musculares. También el estudio dinámico permite valorar si existe rotura de una estructura, un esguince ligamentoso, entre otros.
Ventajas de la ecografía:
- La ecografía es una técnica no invasiva e indolora.
- Se pueden observar las estructuras tanto en estático como en dinámico y siempre en tiempo real.
- La ecografía constituye una técnica de valoración y tratamiento complementaria a las usada habitualmente por el fisioterapeuta.
- Permite realizar técnicas invasivas con mayor precisión al poder observar en directo el foco de lesión.
Ecografía y fisioterapia ¿Qué otros beneficios nos aporta la ecografía en el campo de la fisioterapia?
Puesto que la ecografía estudia la anatomía desde un punto de vista funcional y morfológico, se emplea para realizar procedimientos invasivos y también actúa como biofeedback en los ejercicios de diferente musculatura profunda.
Gracias a esta técnica y la información que aporta, se pueden abordar diferentes campos de la fisioterapia como son:
- Fisioterapia deportiva. Los deportistas son, en gran parte, los principales pacientes que sufren lesiones músculo-esqueléticas. Con el ecógrafo, el fisioterapeuta es capaz de valorar el estado de una articulación, su estabilidad, morfología y estado de las diferentes estructuras que con más frecuencia tienen a lesionarse.
- Fisioterapia ginecológica, dónde, además de valorar el estado de la musculatura podemos ayudar a entrenar la musculatura del suelo pélvico controlando las contracciones mediante biofeedback.
- Lo mismo ocurriría en el caso de trabajar Pilates con ayuda de un ecógrafo. Se puede alcanzar una contracción más precisa de la musculatura estabilizadora profunda por medio del biofeedback.
- También en el campo de la fisioterapia respiratoria es de gran ayuda para valorar y trabajar las contracciones del diafragma, ayudando, por ejemplo, a reestablecer la respiración diafragmática mediante biofeedback.
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